ignorancia de la población adulta española en cuestiones económico financieras elementales

  El Banco de España acaba de publicar una encuesta en la que se muestra la casi total ignorancia de la población adulta española en cuestiones económico financieras elementales

Encuesta de Competencias Financieras 2021 - Encuesta de Competencias Financieras - Análisis económico e investigación - Publicaciones - Banco de España (bde.es)

Encuesta de Competencias Financieras 2021 (bde.es)

https://doi.org/10.53479/34752

ENCUESTA DE COMPETENCIAS FINANCIERAS (ECF) 2021: PRINCIPALES RESULTADOS Y CAMBIOS DESDE 2016

Informe elaborado por Laura Hospido, Margarita Machelett, Myroslav Pidkuyko y Ernesto Villanueva Dirección General de Economía y Estadística Banco de España

Este trabajo presenta los principales resultados de la Encuesta de Competencias Financieras 2021, que muestran la situación de las competencias financieras de la población adulta española a finales de ese año. Además de ofrecer una descripción rigurosa y exhaustiva tanto de los conocimientos financieros de la población como de su relación con el sistema financiero, el documento incluye también resultados para distintos grupos de población definidos por edad, nivel educativo, nivel de renta del hogar o comunidad autónoma, entre otras variables. Adicionalmente, se describen los cambios más relevantes ocurridos en estas dimensiones con respecto a la edición anterior, correspondiente a 2016

La Encuesta de Competencias Financieras (ECF) es una encuesta elaborada por el Banco de España e incluida en el Plan Estadístico Nacional. Su segunda y más reciente edición, correspondiente a 2021, sigue los objetivos de la primera, realizada en 20161

 . La ECF adapta al caso español un cuestionario elaborado por representantes de los gobiernos y bancos centrales de unos treinta países pertenecientes a la Red Internacional de Educación Financiera (INFE, por sus siglas en inglés), coordinada por la OCDE2 . El objetivo de este esfuerzo conjunto es medir de una manera comparable internacionalmente las competencias financieras de la población. La encuesta se utiliza para medir el nivel de conocimientos financieros, lo que incluye la comprensión de conceptos financieros básicos, el grado de conocimiento de distintos vehículos financieros de ahorro, seguro o endeudamiento, su tenencia y adquisición, así como el uso de estos vehículos por parte de la población adulta española de entre 18 y 79 años. El estudio proporciona datos por grupos poblacionales; por ejemplo, según edad, género, nivel de renta del hogar y comunidad autónoma de residencia.

 La ECF incluye las preguntas propuestas en el estudio de la OCDE, adaptando adicionalmente el cuestionario al caso español. En primer lugar, además de las competencias financieras de la persona encuestada, la ECF recoge también información sobre los conocimientos de la persona más informada sobre las finanzas del hogar (en el caso de que no sea la propia persona encuestada). En segundo lugar, la ECF incluye medidas de las competencias cognitivas de los individuos —más allá de las estrictamente financieras— validadas en estudios internacionales. Finalmente, la encuesta contiene un módulo sobre la vivienda principal, en el que se obtiene información sobre las razones para ser propietario o alquilar, las expectativas sobre su precio y, en su caso, sobre cómo se financió la compra (véase recuadro 

1). La encuesta cuenta con la colaboración del Instituto Nacional de Estadística (INE), que ha proporcionado una muestra amplia de individuos seleccionados al azar, representativa de todo el territorio español y de cada una de sus comunidades autónomas (véase esquema 1)3 . En este documento se describen los resultados principales de la ECF2021, así como los cambios observados en las competencias financieras de los individuos entre finales de 2016 y finales de 2021 

El cuestionario de la ECF adapta al caso español un cuestionario elaborado por representantes de los gobiernos y bancos centrales de unos treinta países pertenecientes a la Red Internacional de Educación Financiera (INFE), coordinada por la OCDE.

 El objetivo de este esfuerzo conjunto es medir de una manera comparable internacionalmente las competencias financieras de la población de entre 18 y 79 años. No obstante, si bien en su parte principal sigue este modelo, la ECF incluye también adaptaciones importantes al caso español. En total, la encuesta consta de nueve secciones: 1 Características demográficas y situación laboral del titular muestral. 2 Cartera de la persona entrevistada y modos de adquisición de la información. 3 Fuentes de renta en la vejez o inactividad. 4 Actitudes ante el ahorro. 

5 Conocimientos financieros, estadísticos y económicos

. 6 Toma de decisiones en el hogar.

 7 Vivienda principal. 8 Gastos del hogar y su fragilidad financiera. 9 Conocimientos de la persona más informada sobre las finanzas del hogar. Las primeras cinco secciones —características demográficas, cartera financiera de la persona entrevistada, fuentes de renta en la vejez o inactividad, actitudes ante el ahorro y conocimientos financieros, estadísticos y económicos— se refieren a la persona seleccionada al azar. 

Por su parte, la información de las siguientes tres secciones —toma de decisiones en el hogar, vivienda principal y gastos del hogar— se obtiene para el hogar

La ECF complementa en tres dimensiones el cuestionario del estudio internacional. En primer lugar, además de las competencias financieras de la persona seleccionada al azar, la ECF recoge información sobre las competencias de la persona más informada en el hogar. Así, cuando la persona seleccionada no es la que tiene un mayor conocimiento de la economía y las finanzas del hogar, la persona más informada también ofrece datos sobre sus competencias financieras, estadísticas y económicas y su conocimiento de los productos financieros. En segundo lugar, la ECF incluye medidas, previamente validadas en estudios internacionales, de las competencias cognitivas de los individuos, incluyendo su comprensión lectora, numérica y estadística. Finalmente, la encuesta contiene un módulo sobre vivienda, en el que se pregunta a la persona encuestada sobre sus razones para ser propietaria o inquilina, sus expectativas sobre la evolución del precio de su vivienda de residencia durante los doce meses siguientes a la encuesta y, en caso de haber financiado la compra de la vivienda principal con una hipoteca, la ratio préstamo-precio de compra y el pago mensual del préstamo. 

En este informe los conocimientos financieros se miden mediante tres preguntas generales que han sido utilizadas previamente en varios estudios internacionales, además de por la OCDE (Lusardi y Mitchell, 2014). Las preguntas miden la comprensión de los conceptos de inflación, interés compuesto y diversificación del riesgo. Responder correctamente a la pregunta sobre la inflación (primera pregunta) requiere entender que una cantidad de dinero a percibir en el futuro pierde capacidad de compra cuando suben los precios. Responder correctamente a la pregunta sobre el interés compuesto (segunda pregunta) requiere darse cuenta de que la evolución de una cantidad ahorrada en una cuenta bancaria durante cinco años depende no solo del tipo de interés anual aplicado a la cantidad ahorrada el primer año, sino también de los intereses acumulados desde entonces. Finalmente, responder correctamente a la pregunta sobre la diversificación del riesgo (tercera pregunta) requiere entender que el riesgo asociado a invertir en renta variable disminuye si se adquiere una amplia gama de acciones en lugar de un único tipo. Entre toda la población española de 18 a 79 años, el porcentaje que responde correctamente a la pregunta sobre la inflación se sitúa en un 65%, mientras que alcanza un 41% en la pregunta sobre el tipo de interés compuesto y un 52% en la relativa a la diversificación del riesgo (véase cuadro 2). Tal y como muestra el gráfico 1, el porcentaje de respuestas incorrectas y respuestas «no sabe» varía entre unas preguntas y otras. El porcentaje de individuos que responde incorrectamente a la pregunta sobre la inflación es del 26%, mientras que un 7% responde «no sabe». En cambio, cerca de una de cada dos personas (el 46%) responde incorrectamente a la pregunta sobre el interés compuesto y un 12% responde «no sabe». Finalmente, cerca de una de cada tres personas (el 28%) responde incorrectamente a la pregunta sobre la diversificación del riesgo, mientras que la proporción de quienes responden «no sabe» es más elevada y alcanza a una de cada cinco personas (el 20% de los individuos). Es importante distinguir entre respuestas incorrectas y «no sabe» por dos motivos. En primer lugar, porque las implicaciones de una respuesta incorrecta son diferentes de las de una respuesta emitida por quienes reconocen no saber. El primer grupo puede no ser consciente de su error, mientras que los segundos pueden tender a recabar el consejo de profesionales a la hora de adquirir un producto financiero (Hospido, Izquierdo y Machelett, 2021). En segundo lugar, porque las respuestas incorrectas reflejan falta de conocimientos, mientras que una respuesta «no sabe» puede reflejar una genuina falta de conocimiento o bien una falta de predisposición a revelarlo; por ejemplo, una falta de confianza a la hora de saber la respuesta correcta (véase Bucher-Koenen, Alessie, Lusardi y Van Rooij, 2021, y Hospido, Iriberri y Machelett, 2023). Quienes eligen «no sabe» en lugar de dar su respuesta preferida pueden saber cuál es la respuesta correcta pero preferir no decirla. Si hay diferencias en la propensión a elegir el «no sabe» entre grupos demográficos, ello puede resultar en una medición de brechas de conocimientos financieros mayor que la que se obtendría si todos los individuos eligieran su respuesta preferida sin dudarlo

Conocimiento de productos financieros

 Como puede apreciarse en el gráfico 7, un 60% de la población ha oído hablar de las cuentas de ahorro y un 72% de la renta fija, que son los productos menos conocidos por la población objeto del estudio. Por otra parte, son más conocidos los planes de pensiones, los fondos de inversión, las acciones y las criptomonedas —entre el 84% y el 88% de la población del estudio ha oído hablar de ellos (véase cuadro 4)—. Comparando el grado de conocimiento de las cuentas de ahorro o productos de renta fija entre 2016 y 2021, se detecta una caída del porcentaje de quienes han oído hablar de cuentas de ahorro (13 pp) o renta fija (6 pp) (véase el gráfico 7). Como se verá en la sección 3.2, la caída registrada entre 2016 y 2021 en el conocimiento de las cuentas de ahorro ha coincidido con una disminución en la tenencia de este producto financiero. En cambio, entre el 95% y el 98% indica haber oído hablar de los seguros de vida, seguros médicos, tarjetas de crédito, hipotecas y préstamos personales. Al ser tan alto el nivel de conocimiento de dichos productos, no se observan grandes diferencias entre grupos demográficos, por lo que el resto de la discusión se enfocará en los vehículos de ahorro

Gastos por encima de ingresos y su financiación 

Las competencias financieras de la población española también se reflejan en los modos de financiación del gasto cuando este excede a los ingresos. La unidad de análisis de este epígrafe es el hogar en el que residen los individuos entrevistados en lugar de los individuos, dado que varios tipos de gastos suelen ser comunes en el hogar. El cuadro 8 muestra cómo un 25% de la población vive en hogares cuyos gastos han superado a los ingresos en los últimos doce meses. Este porcentaje es más elevado entre los individuos con menores recursos, como aquellos con un nivel de educación inferior a bachillerato (32%), los desempleados (43%), quienes residen en hogares con rentas menores de 15.000 euros (43%) o aquellos que residen en hogares que no son propietarios de su vivienda principal (37%). También es más elevado entre los individuos que no nacieron en España (41%). Además, una mayor proporción de mujeres (28%) que de hombres (23%) reside en hogares en esta situación. Como muestra el gráfico 18, el porcentaje de individuos que residen en hogares cuyos gastos exceden a sus ingresos varía poco por edad, aunque alcanza el 29% entre los individuos de 45 a 54 años (4 pp por encima de la media de la población del estudio)

Encuesta de Competencias Financieras 2021 (bde.es)

Comentarios

Entradas populares de este blog

Necesitamos un reset / Los funcionarios no pueden gestionar los fondos europeos

Los fondos deben de distribuirse con modelos de 4 y 5 helices

¿Por qué nuestros políticos no siempre basan sus decisiones en lo que dicen los estudios?